Barcelona, 2 ene (EFE).- Volaron los dos primeros puntos del Camp Nou. Y tuvo que ser el Villarreal, un equipo al que habitualmente se le dan muy bien sus visitas al coliseo azulgrana el que tuviera tal honor. Un premio merecido, porque lo hizo además jugando al fútbol, imponiendo su estilo, tuteando, con sus mismas armas, al Barcelona de la seis Copas.El líder Barcelona empató hoy 1-1 como local ante el Villarreal, en la reanudación de la Liga española de fútbol luego de la pausa por el fin de año.
Los actuales campeones salieron delante desde temprano, gracias al tanto de Pedro, quien no pierde ocasión para retribuir con goles la confianza del DT Josep Guardiola.
En el minuto siete el atacante canario fusiló al arquero Diego López, después de tomar el rebote de un potente disparo al travesaño del francés Thierry Henry.
Aunque el Barça mostraba mayor dominio, el cuadro castellonense no se escondió y salió en busca de la igualada.
La merecida paridad en la pizarra llegó en los primeros minutos de la segunda mitad, por intermedio de David Fuster, tras una buena combinación con Cani.
A partir de ahí el encuentro se mantuvo muy parejo y el Submarino Amarillo se convirtió en el primer equipo que consigue puntuar en el Camp Nou esta temporada.
El once azulgrana continúa al frente de la clasificación, pero mañana el Real Madrid podría alcanzarle si derrota al Osasuna.
Por su parte, el Valencia se apoyó en la gran estatura del delantero serbio Nikola Zigic para imponerse 1-0 al Espanyol en el tiempo de descuento.
Zigic -de 2.02 metros de altura- se levantó sobre la defensa rival y cabeceó con acierto un centro de Joaquín en el minuto 93.